Estas palabras del Pastor Principal de la histórica Iglesia Bautista Alfred Street en Alexandria, Virginia, retumban en todos los Estados Unidos y se han vuelto virales en las redes sociales porque, para muchos, resumen el mensaje que se debe dar ante la inmensa controversia que se ha originado por el asesinato del famoso activista de derecha Charlie Kirk.
Mientras sus seguidores acusan a la “izquierda radical” por el crimen e intentan encontrar en la ideología woke la base del ataque, los contradictores señalan que su “discurso de odio” hacia grupos determinados de la sociedad llevaron a que alguien tomara la decisión de acabar con su vida.
Hay que ser claros, muy claros. Ninguna forma de violencia debe ser aceptada en nuestra sociedad. Tanto la violencia de derecha, como la violencia de izquierda son malas y tienen que ser rechazadas de forma contundente. No tienen ninguna justificación. No es acabando con la vida del otro como se deben dirimir las confrontaciones ideológicas y políticas.
Hay que respetar al que piensa diferente y tener muy presente que en toda democracia el sagrado derecho a elegir a través del voto es la única forma de vencer a los rivales e imponer sus ideales.
Y así como se debe tener en cuenta esto, también es muy importante reconocer que lo que más daño le ha hecho al país es el discurso racista, extremista, excluyente, sectario y discriminatorio que se fortalece y que enrarece el diario vivir. Y peor aún cuando llega del propio gobierno y de funcionarios que tienen la obligación de trabajar por todos y luchar por el bienestar de todos. ¡Dividiendo no es como se gobierna!
Es tan evidente este hecho, que la mismísima, Sonia Sotomayor, jueza de la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos, expresó su preocupación ante lo que llamo “Los intentos por criminalizar la libertad de expresión”
Estados Unidos está muy dividido y viviendo un grado de polarización que nunca nadie imaginó. Por el bien de todos, es el momento de desarmar los corazones y los espíritus. Si no, como ya lo sienten algunos, estaríamos en las puertas del infierno que significa una verdadera guerra civil.
